El concepto de unión, de hermandad y de pertenencia al grupo es básico para la supervivencia de África, y los africanos lo conocen bien. Por ello, frente a la crisis del Covid-19, se ha decidido actuar a nivel continental, y no de manera individualizada. De hecho, en el seno de Unión Africana (UA), se ha creado la Africa Joint Continental Strategy for Covid-19 Outbreak, cuyo fin es dar una respuesta homogénea al continente, a la vez que sitúa  a la UA en una posición competitiva como receptora de fondos, competitividad que no tendrían los países africanos por separado en el escenario internacional actual.

Si bien es cierto que la capacidad de detección de casos positivos en Covid-19 es menor en África que en otros continentes, los datos con los que contamos son, cuanto menos, sorprendentes. Según en Centre for Disease Control and Prevention (Africa CDC), a fecha de 10 de diciembre, los casos en todo el continente ascendían a 2.323.845, con un número muy elevado de recuperados, 1.928.277, mostrando por tanto una incidencia menor que otras regiones del planeta. Hay que destacar además que casi la mitad de los contagios, el 40,44%, corresponden a Sudáfrica.